El desafío del cambio

Aditya Vikram Birla A la luz de la dramática transformación del entorno económico y empresarial, el Sr. Aditya Birla examina su impacto en la industria india y recomienda maneras en que las empresas pueden afrontar el desafío del cambio.

Pensamientos compartidos por el Sr. Aditya Birla en el Rotary Club de Bombay el 13 de septiembre de 1994.

Ha habido cambios dramáticos, radicales y profundos durante los últimos tres años, no solo en India sino en otros países. Hace tres años, hubiera sido difícil creer que una metamorfosis como esta pudiera suceder en el escenario económico del país; que lleva a cambios, no solo en las empresas e industrias, sino en nuestra propia psique, en nuestra actitud, en nuestra manera de pensar e incluso en nuestras vidas diarias.

Déjenme guiarles por este escenario económico evolutivo, para darle un sentido del alcance de la transformación, su magnitud, su vuelco y profundidad de las reformas, y cómo la industria india está globalizando, en términos de tamaño, propiedad, comercio y actitudes.

Tamaño

Hablemos primero del tamaño. La globalización y el tamaño están casi inextricablemente vinculados. Como todos ustedes saben, la industria india, durante demasiado tiempo, ha vivido bajo el régimen draconiano de las capacidades controladas y oficialmente prescritas, guiada por la política y no la economía, que ha resultado en unas capacidades fragmentadas y subóptimas que no son económicas.

Sorprendentemente, en el pasado, producir más era un crimen. ¡Una vez casi me entregaron una notificación judicial por producir más! Esta locura solo podía existir en la India de un pasado no muy lejano.

A veces es difícil comprender el salto cuántico que ha tenido lugar en las dimensiones de las plantas. Desde plantas fragmentadas y pequeñas, hoy en día hemos llegado a una posición donde podemos enorgullecernos de tener plantas de escala mundial en varias industrias.

Déjenme darles algunos ejemplos de nuestro propio Grupo, porque es lo que sé hacer mejor. Hoy en día, nuestro Grupo es el mayor productor del mundo de la fibra discontinua de viscosa. Operamos la refinería de aceite de palma más grande del mundo, con una asombrosa capacidad de 3500 toneladas al día. Nuestro Grupo es el tercer mayor productor del mundo de aislantes y el sexto mayor productor de negro de carbón.

Esto sucede cuando llevamos solo tres años en el proceso de liberalización. Imaginen cuáles pueden ser nuestros logros en la globalización dentro de diez años si seguimos el virtuoso camino de liberalización actual. La industria india tiene un papel clave que jugar en la prosperidad de nuestro país. Se debe liberar todo su potencial si queremos que las empresas indias hagan negocios.

Propiedad

Continuando desde el tamaño, paso al aspecto de la propiedad global de los valores indios. Hace menos de cinco años, en 1990-91, las empresas indias movilizaron Rs. 9700 crores desde el mercado primario de India en aquel momento, los fondos recaudados de inversores institucionales extranjeros, por medio de GDR, o eurobonos o la inversión en mercados secundarios; todos fueron un lamentable, rotundo cero.

La globalización ha abierto las compuertas para la industria india de la vasta reserva de capital internacional. De estar empotrados en un caparazón ahora nos volvemos globales en lo que respecta a la propiedad.

Comercio y exportaciones

Ahora paso a otra dimensión fundamental de la globalización: el comercio. La industria y el comercio van de la mano. La industria india no puede globalizarse sin tener comercio global.

No hace demasiado, India era un anacronismo. En un mundo abierto; una mirada introspectiva, restringida, protegida, aislada y un mercado muerto, casi una no entidad. No podríamos haber importado menos. El mundo apenas prestaba atención a este gran y talentoso país.

`Pero ahora la industria india entra en la madurez y nuestros competidores solo nos toman a la ligera a su propio riesgo. En nuestro Grupo, competimos eficazmente en los mercados internacionales, en varias áreas de producto. Afrontamos la competencia de cara, sin soporte gubernamental, sin subsidios con nuestros propios medios.

Psique y planificación global

La globalización no es solo un cambio de los números. También significa un cambio profundo en nuestra psique y en nuestra planificación. El cambio de actitud se refleja en el hecho de que, mientras que en el pasado creábamos plantas con capacidades subóptimas, hoy en día establecemos industrias con el tamaño económico mínimo mundial. Consideramos no solo el mercado indio, sino que consideramos que el mundo es nuestro mercado. Desde una actitud introspectiva también comenzamos a mirar al exterior.

Ahora calculamos la rentabilidad de los nuevos proyectos no solo en base a los actuales aranceles aduaneros, sino en base a los impuestos más bajos previstos en el futuro. Antes solíamos buscar protección en casa, con barreras arancelarias, porque el mercado doméstico era todo lo que conocíamos.

Hoy en día somos agresivos, pero no tanto con barreras arancelarias proteccionistas en casa, sino también buscando demoler las barreras comerciales en los países desarrollados, de forma que podamos tener un mayor acceso a sus mercados. Mi firme convicción es que India será una fuerza económica global a tener en cuenta en un futuro no muy distante.

A veces, algunos de nuestros países son aprensivos acerca del lento ritmo de las reformas y la industrialización. Les digo: un bebé tarda nueve meses en nacer. Sean pacientes. Tres años de reformas son solo el comienzo de los fuegos artificiales. Juntos veremos, durante la próxima década, a India emergiendo como una de las grandes historias de éxito económico.

Establecer industrias en India por parte de multinacionales para el mercado local y exportaciones

Veamos otra consecuencia significativa de la globalización de la industria. Las corporaciones multinacionales migran y vienen en bandada a India y crean una plataforma para los mercados locales así como de exportaciones. Hay varias consecuencias incómodas de esta invasión. Igual que pasa con cualquier cambio, la rosa tiene espinas. Una de las consecuencias negativas ha sido que en varios artículos de consumo de marca, los fabricantes indios se han retirado. Esto ya ha pasado con productos como refrescos, artículos de higiene y otros, y es probable que pase también en otras áreas. En la electrónica de consumo como los TV, igual que en otras varias industrias, las multinacionales extranjeras toman y se aseguran un dominio sobre la participación en valores, subyugando así el papel de los emprendedores indios.

Mientras que los consumidores se beneficiarán, el espíritu emprendedor, que también es un rasgo raro en todo el mundo pero que India es afortunada de tener en abundancia, ciertamente perderá su carácter vibrante. Si estos cambios son buenos o malos solo lo dirá el tiempo. Pero sin duda hay cambios cataclísmicos en camino.

No todo puede ser guay. Debemos aprender a vivir con los cambios y perseverar y luchar. Sin duda, algunas empresas indias caerán. Algunas recuperarán el terreno perdido y muchas prosperarán y emergerán como contendientes mundiales.

India no es una excepción, reforma un fenómeno mundial

Aunque alabamos las reformas económicas de India, permítanme enmarcar también el avance de India hacia la globalización, en su perspectiva más amplia y equilibrada. Los trabajos de reforma de India, aunque reseñables, están impulsados por la compulsión global. No es algo destacable ni extraordinario.

Tenía que hacerse. No había opciones. Era una elección de Hobson. Sin ella, India hubiera quedado totalmente marginada. Como destacó un economista: ‘No hay ninguna fuerza tan poderosa como  una idea cuyo momento ha llegado’.

No debemos engañarnos diciendo que hemos sido pioneros. El hecho es de que nos ha barrido la fuerza de la ola y ahora no tenemos más elección que subirnos a ella para que no nos salpique el agua. Dicho esto, ciertamente a crédito de nuestros Primer Ministro y Ministro de Finanzas, hemos percibido las corrientes dominantes, rompiendo decididamente con el pasado y dirigiendo al país al panorama global.

Las ruedas del comercio

Lo que vemos es el encogimiento del globo a medida que las ruedas del comercio giran inexorablemente. Los principios básicos de la economía, repentinamente, se reafirman y anulan las consideraciones políticas estrechas y mal orientadas, en todo el mundo y al mismo tiempo las industrias ahora se ubican y reubican donde son más rentables. Esta realineación está sucediendo en todo el mundo. Depende de India aprovecharla.

Esto da a los países en desarrollo la oportunidad de industrializarse a escala mundial. Permítanme citar mi propia experiencia. Tailandia solía importar negro de carbón de Japón. Hoy en día, nuestra planta de Tailandia, cuyo tamaño está solo por detrás de la planta japonesa más grande, exporta negro de carbón a Japón, un avance. Tailandia solía importar resina epoxídica de Japón. Hoy en día, nuestra planta de Tailandia exporta resinas epoxídicas a nuestro propio colaborador en Japón, un giro total. Japón era un gran exportador de fibra de viscosa al mundo. Hoy en día nuestras plantas han conseguido un gran segmento del mercado ASEAN, forzando a Japón a descargar el 30 % de su capacidad de fibra de viscosa.

En este caleidoscopio cambiante de empresas mundiales, India debe capitalizar esas oportunidades emergentes de industrialización en el contexto global.

Futuro de las empresas indias

He hablado, hasta ahora, de la entrada de multinacionales en India. Pero este tema no estaría completo si no hablamos de las emocionantes y exigentes oportunidades que se presentan ante nosotros, los grupos indios, de convertirnos en realmente multinacionales, de aventurarnos.

Para no sonar inmodesto, mencionaría que, hoy en día, nuestro Grupo tiene más de 20 empresas de gran éxito fuera de India, con un alcance mundial que incluye Egipto, Tailandia, Indonesia, Filipinas y Malasia, y con unos ingresos combinados que superan los Rs. 3.500 crores. Ahora tenemos nuestra mira puesta en Vietnam, Rumanía, Polonia y Rusia.

Obstáculos para la globalización

También me gustaría resaltar que el camino a la globalización está repleto de obstáculos. Mencionaré los tres principales:

  • El espectro de proteccionismo de los países desarrollados
  • La resistencia ejercida por el sector público
  • El nudo de unas infraestructuras dilapidadas

Proteccionismo en países desarrollados

He mantenido que ‘No nos da miedo la competencia; que la competencia nos tema a nosotros’. Sin embargo, un obstáculo nuevo y real para la industria india es el hecho de que incluso aunque más de 20 países en desarrollo hayan reducido sus aranceles, 12 países desarrollados han ido por el camino contrario y los han subido. Aparte de los aranceles, existen leyes injustas antidumping y también debemos afrontar barreras cuantitativas, como cuotas. Para empeorar las cosas, las leyes antidumping están redactadas, de forma injusta y abierta, a favor de los países desarrollados. Estas medidas dificultan la globalización de la industria india.

En una conversación con el Presidente del Banco Mundial, le mencioné respetuosamente que habíamos reducido nuestros aranceles en respuesta a los sermones del Banco Mundial.

Mientras que nosotros hacemos esto, los países desarrollados suben sus aranceles. Con angustia, le dije: ‘¿Por qué no les pide a ellos también que reduzcan sus aranceles?’. Tras un argumento prolongado, en el que defendió a los países desarrollados, el Presidente finalmente cedió a la razón y la lógica y dijo: ‘Bueno, Sr. Birla, la diferencia entre su país y los desarrollados es muy simple: ellos son los prestamistas y ustedes son los prestatarios. Por lo que no podemos sermonearles a ellos’.

Por tanto, amigo, para proseguir con la globalización de la industria, debemos luchar en cada foro internacional para que haya fronteras abiertas y un acceso mucho más libre a los mercados desarrollados.

Proyectos ineficaces del sector público

En lo que respecta al funcionamiento de estos proyectos, me gustaría reiterar que he rogado en Delhi que si la industria debe volverse eficiente, los PSU, que proporcionan los recursos, como productos del petróleo, carbón, energía, transporte, etc. deben volverse eficiente, porque estos recursos constituyen gran parte de nuestro coste de producción. Para que los proyectos del sector público sean eficientes es importante que se corte el cordón umbilical entre Delhi y el sector público antes de que ambos, madre y bebé, encuentren problemas.

Si el sector público se vuelve eficiente, nosotros nos volveremos eficientes; si son ineficientes, nosotros, por tanto, nos volvemos ineficientes. Por tanto, mi primera recomendación es: que el Gobierno Central venda el 51 por ciento de las acciones de estos proyectos del sector público a los ciudadanos.

Unas infraestructuras deficientes y fracturadas

Habiendo desenrollado la carpeta roja para todos, deberíamos contener nuestra euforia. La industria necesita infraestructuras. Las infraestructuras deficientes, que chirrían y se rompen por las costuras, son hoy en día un impedimento mayor e inmediato, uno que puede ahogar a la actividad económica.

La energía es crónicamente insuficiente en todo el país. Desafortunadamente, no hay una política energética clara. El Gobierno autoriza caso por caso los proyectos energéticos. La liberalización todavía debe llegar a este sector, que debería tener unas pautas transparentes. Además, los mejores y más competitivos no son necesariamente los elegidos en las evaluaciones subjetivas, en contraste con unos criterios objetivos y transparentes.

Les daré un ejemplo de transparencia que garantiza la selección de los mejores. Este podría ser un modelo para India. En Tailandia, había cinco candidatos que pujaron para construir una planta de negro de carbón aunque solo eran necesarias dos plantas. El Gobierno tenía un dilema y no sabía cómo afrontar la situación sin dar la impresión de favorecer a una parte. Para solucionar el problema, pidieron a todos los candidatos garantías bancarias que se harían efectivas por la mitad del costo del proyecto si el candidato no lo implementara. Dos candidatos dieron garantías bancarias: nosotros y otro candidato tailandés, mientras que el resto se retiraron. Esto es transparencia.

Tareas para la industria india: pasos hacia el siglo XXI

He hablado bastante de las corrientes amplias de la globalización Permítanme mencionar ahora, brevemente, lo que creo que necesita la industria india para volverse vibrante, dinámica y con amplitud de miras para entrar en el siglo XXI. Creo que hay ciertos preceptos básicos a seguir y con ellos no puede haber transigencias:

Al establecer una planta, no se debe mirar solo al mercado indio. Se debe mirar también al mercado mundial, establecer una planta de tamaño económico mundial. Los días de las capacidades fragmentas han terminado.

Segundo, conseguir la mejor tecnología disponible mundialmente. No debemos conformarnos con la segunda mejor. Elegir la tecnología más eficaz, que garantiza la mejor calidad de producto y la rentabilidad para resistir la severa competencia internacional.

Tercero, institucionalizar la I+D e invertir fructíferamente en ella. Cuanto más fuertes nos volvamos, más difícil será conseguir tecnología. Hoy en día nadie proporciona tecnología a nuestro Grupo para VSF, negro de carbón o aislantes. Nos ven como una amenaza a su propio dominio; por tanto debemos desarrollar nuestra propia tecnología en departamentos de I+D internos.

Cuarto, una lección que me gustaría compartir con ustedes: nunca pongan en riesgo la calidad. Aunque, a corto plazo, es un ejercicio caro, en el análisis final la calidad siempre compensa y lo hace muy bien. Puedo decirlo por experiencia personal.

Por último, pero no menos importante, inculcar una filosofía de mejoras continuas en todas las esferas de la actividad de la gestión. Esta mentalidad, esta filosofía, deben ser penetrantes, ya sea en la mejora de la calidad, el recorte de gastos, la gestión de la fuerza laboral y el personal, o los departamentos de I+D internos, asimilando las últimas tecnologías. Solo esta atención meticulosa, constante y consistente para lograr la excelencia garantizará que las empresas indias se mantengan competitivas en cuanto a costes y ganancias, sobrevivan y avancen contra los vientos fríos y despiadados de la globalización.

Este, pues, es el drama de la globalización de India:

  • Motivada por los vientos escarpados del cambio global
  • Motivada por las esperanzas y aspiraciones de los habitantes de India
  • Motivada por la asociación entre el Gobierno y el sector privado y, por encima de todo,
  • Motivada por la indomable voluntad de los emprendedores indios